Las dietas a base de mariscos son excelentes para adelgazar en poco tiempo sin descuidar los nutrientes del organismo, pues estos productos contienen muy poco porcentaje de calorías, lo cual ayuda a bajar de peso en un tiempo más corto.
Es importante la cocción que lleve el marisco, pues el exceso de cocinado o la exposición a aceites para freírlo perjudica la mayoría de nutrientes que estos contienen, lo cual daña por completo la función de la pirámide alimenticia acuática.
Beneficios de comer mariscos
Como se dijo anteriormente la ingesta calórica se controla efectivamente con estas dietas, asimismo los mariscos proveen proteínas y nutrientes esenciales para el organismo que además de incrementar el sistema inmunológico, ayudan a la absorción de otros nutrientes presentes en el resto de los alimentos.
Compuestos esenciales como el calcio, hierro, fósforo y yodo son provenientes de los mariscos y lo mejor es que no requieren mucho tiempo sobre el fuego. Además, la carne de esta es sumamente suave y fácil de digerir lo que ayuda al organismo a encargarse de la absorción de nutrientes.
Riesgos de comer mariscos
Es de suma importancia saber el origen del marisco que se va a consumir pues, si se desconoce el estado de conservación que éste tuvo se corren altos riesgos de intoxicación.
De hecho, cabe resaltar que estas carnes son la tercera causa de alergias en el mundo, así que no es recomendable comprar estos alimentos en comercios ambulantes o que carezcan de cuartos de refrigeración para la conservación de los moluscos.
Si se elige buscar el alimento directamente en el mar, también se aconseja hacerlo en zonas que no hayan sido afectadas por el fenómeno natural conocido como “mar rojo” pues los cambios químicos del mar contienen toxinas que son ingeridas por el molusco y que posteriormente podrían entrar en nuestro organismo si no se prevé.
Cabe añadir que ha habido casos de intoxicación al inhalar los vapores de estos moluscos mientras se cocinan.
Los tratamientos de esta afección pueden variar entre antibióticos si se trata de moluscos en zonas de poca higiene o antihistamínicos en caso de sufrir una alergia.
Se recomienda acudir inmediatamente a una consulta médica si se observan reacciones como vómito, diarrea, dolor abdominal, salpullido o en los peores casos coloración azul en la piel o pérdida de conciencia. En importante estar atento ya que estas reacciones, sobre todo la de alergia se desatan cuando el cuerpo se vuelve sensible a estos componentes, es decir, después de la tercera o cuarta ingesta de alimentos en mal estado.
¿Los niños pueden consumir mariscos?
Al ser un alimento sumamente alergénico, muchas instituciones recomiendan inducir esta alimentación entre los 12 y 18 meses de edad pues estos comestibles aportan nutrientes que ya contienen otros alimentos.
Sin embargo, para aquellos niños que tengan herencia de desarrollar alergia a los mariscos, se les recomienda no empezar a consumirlos hasta después de los 3 años de edad.
Academias norteamericanas señalan que los crustáceos son más propensos a desarrollar reacciones alérgicas por lo que no se recomienda su inducción a corta edad. Sin embargo, los moluscos como las almejas son menos propensas a desarrollar estas reacciones. No obstante, existen personas alérgicas a ambos mariscos.
Para evitar esto, se recomienda cocinarlos cuando se encuentren frescos y sobre todo hay que comerlos crudos o en conserva, pues se corren riesgos de intoxicación. A pesar de ello, cabe decir que si los cocinas bien y los acompañas de vegétales podrás complementar los patos de los niños.